Gartámbolo de José

"Eran 2 chicos requete finos,
eran 2 chicos medio chiflaos,
eran 2 chicos casi divinos,
eran 2 chicos desfarataos."

- fragmento de los escritos póst-tumors del Dr. Bring Kastas, Psiquiatra, Poeta, y Director de la Clínica Psiquiátrica "M. A. Solís".

Las investigaciones contemporáneas han cavado aun más profundo dentro de la cultura popular. Cavar profundo puede llevar a cualquier parte, y es así como se llegó a la canción que salpica de entre los dientes de los inocentes. Es así como se llegó a José De la Garma (paciente núm. 614, salita gris).

Se desconocen los detalles biográficos de José. Todo lo que se sabe de él se ha encontrado en su historial médico, bajo el colchón de agua de su psiquiatra y compañero de gimnasio de los últimos baños de su vida, el Dr. Kastas. El tratamiento de José consistía en el llamado "proceso Gampalg" de depuración esquizofrénica.
Vale la pena destacar antes de continuar que, las conversaciones de José consigo mismo se remontan a su más temprana infancia, producto inherente de José, padre putativo (PP) de Jesucristo; sin obviar el hecho inconfundible de una actitud festiva, en donde se exclamaba lo mismo de bar en bar.
En medio de los registros de las sesiones sorpresa del Dr. Kastas, se encuentra el siguiente texto:

"Si se encontraban en una esquina,
o se encontaban en un café,
siempre se oía con voz muy fina,
el saludito de Don José"

Doña Twinnings, madre de la madre de José, tomó su última taza de té aquella mañana de agosto, en la famosa "Esquina de Homero Manzi" (reservas al 4957-8488, líneas rotativas). La anciana fue embestida por la furia egocéntrica del fruto de su propia descendencia, y arrastrada por todo Boedo hasta la puerta de su casa. Desmesurado, cruel, y feo.

"Hola Don Pepito,
Hola Don Jose,
Pasó usté por mi casa?
Por su casa yo pasé.
Vió usted a mi abuela?
A su abuela yo la vi.
Adiós Don Pepito,
Adiós Don José."

- José de la Garma, últimas palabras en papel glasé antes de pegarse un un tiro en la sien.